Esquemáticamente, el proceso de estudio podemos descomponerlo en tres partes, a saber:
- Reducción. Se trata de una fase importante por ser la primera y por condicionar de alguna forma las fases que le suceden. Se basa en la lectura, primero rápida (vocabulario), luego comprensiva (subrayar, anotaciones) y por último analitica para extraer lo fundamental y porderlo representar de forma organizada (resumen, esquema). Básicamente haremos: lectura, subrayado, anotaciones, resumen (síntesis) y esquema.Todo ello para poder capturar lo importante y lo necesario para poder comprender y explicar lo estudiado. Redactar lo extraído (resumen, síntesis) y condensarlo en una o dos hojas de forma muy visual, dirigido a la vista (esquema).
¿Cómo organizar un texto de forma esquemática?
a) Identificar que reproduce el texto redactado, que puede ser: un proceso (secuencia), una descripción, una comparación, un problema con solución, una causalidad.
b) Adaptar la representación al tipo de texto encontrado.
2. Memorización. Repetir para conservar y recuperar.
Debemos saber que lo que se entiende se memoriza mejor que lo que no se entiende. Esto significa que existe un correlación importante entre comprensión del material de estudio y grado de permanencia en la memoria. No debemos intentar memorizar directamente sobre la totalidad de contenidos, si nuestros resúmenes y esquemas son buenos, debemos memorizar sobre ellos, ¿de que forma?
- Plantearse preguntas sobre lo estudiado. Transformar los títulos en preguntas. Ayudarse primero de los recursos gráficos y luego sin nada.
- Utilizar el esquema para repetir las ideas principales y cómo se estructuran. Primero teniendolo a la vista y después oculto.
- Recurrir al texto cuando sea necesario para fijar toda la información relevante que nos permita explicar, argumentar y ejemplificar cada idea.
- Utilizar procedimientos gráficos y reglas mnemotécnicas.
3. Recuerdo. Repaso.
- Repasar: comenzar cada sesión de estudio repasando los temas memorizados el día anterior; repasar cada tema al cabo de un cierto tiempo (varios días, una semana). Programar el repaso.